Schoelcher,
Viernes 24 de octubre de 2008
¡Cómo pasa el tiempo! Ya llevo aquí más de un mes y tengo la sensación de haber llegado ayer, porque no he parado en todo este tiempo. Al mismo tiempo, el hecho de volver al país confiere cierta falsa sensación de continuidad “como si no me hubiese ido nunca” y sin embargo, muchas cosas han cambiado como convendría esperar, supongo. Se palpa en el ambiente de las calles, de las casas, del trabajo una fricción constante entre lo “moderno” y lo “antiguo”…
Universidad
Como anunciaba anteriormente, el 29 de septiembre empezaba a dar clases de Economía Internacional a estudiantes de 3er año. Tengo 2 clases de 40 estudiantes cada una y casi cada semana recojo sus trabajos para corregirlos; no siempre se hace, pero lo prefiero así para que vayan consiguiendo unos puntos antes del examen final… Puse unos pequeños exámenes esta semana y no ha salido nada glorioso, y eso que iban sobre aviso…
Cuando me advirtieron los demás profesores que los estudiantes de hoy en día son los “jóvenes de hoy en día”, porque fueron educados así o por x razones, prefería juzgarlo por mi misma, pero lo que sí veo es que a unos veinteañeros les cuesta leer y retener la información, y más aún redactar una síntesis de la información recibida, de forma coherente y en un francés correcto… Por lo que no solamente corrijo cálculos matemáticos sino también los análisis de textos y de la actualidad, corrigiendo tanto el contenido como la forma (ortografía, sintaxis, organización de las ideas, etc..).
Con todo, es apasionante y consigo reírme bastante y que se rían también ellos –aunque la clase del lunes menos que la del miércoles por la noche, por ser lunes seguramente…- Y es que al marcharme de St-Pierre una hermanita me encargó ser una profe alegre para los “jóvenes de hoy en día”, así que me encomiendo a los ángeles –los de los estudiantes y míos- para cumplir con esta misión.
También me río mucho con los demás investigadores del laboratorio. Aquí se cruzan doctorandos, profesores, consultores y conferenciantes de distintos horizontes, lo cual es muy enriquecedor. O sea que mi miedo al volver al país y acabar aislada del resto del mundo ya me parece bastante infundado. Ahora mismo, espero poder colaborar y publicar en investigaciones de gente de distintos países… Por supuesto, la prioridad es acabar la tesis cuanto antes, pero cada vez más la política universitaria es que los doctorandos den coloquios y seminarios, y empiecen a publicar antes de conseguir el título de doctor. O sea que estaré ocupadita.
http://picasaweb.google.es/luciabangelo/MartiniqueUniversit#slideshow
El tiempo
Vale, estamos en el Caribe y hace calor pero, en un mes y pico que llevo aquí, ha llovido casi todo el mes : vale, estamos en plena temporada de huracanes pero dicen que no había llovido así en veinte años… Hace unos días, en una noche de luna llena, una marea espectacular y más que inusual en el mar del Caribe, se llevó media costa oeste, descuartizando unos cuantos barcos dejados en los amarres a pesar de la alerta meteorológica…
Así que puedo tranquilizar a los envidiosos – por si mal de muchos fuera consuelo de tontos: aún no he ido a la playa desde que he llegado. También es cierto que no tengo coche todavía. Ya hablaremos dentro de un par de semanas, pues…
No quería incrementar el ya desmesuradamente grande parque automóvil de la isla pero tener coche se ha convertido en un bien básico: por la mala organización de los transportes públicos, por el tiempo (!), por la delincuencia (aparecida junto con las drogas duras a principios de los 90s), por … las prisas por llegar a pesar de tantos atascos L…
De momento, cojo el autobús de vez en cuando y el resto del tiempo me vehiculan los primos/as, compañeros/as del laboratorio; y cada mañana un tío con quien voy a misa de 6:30 (sí, 6:30).
O sea que todos los días, me levanto sobre las 5h -antes de la salida del sol pero ya hay algo luz- todos los días, menos los domingos, sí, sí. Ya se sabe, cuando no hace frío, no cuesta nada salir de la cama! Eso sí, intento apagar luces a las 22h!
Kay’ Léontine
Vivo en casa de mi tía-abuela Léontine (tiene 85 años pero no le gusta parar quieta), mi prima, su marido y su hijo de 2 años y medio, Kilian (alias “Jojo la Terreur” o “el intrépido”). Mi tía-abuela es muy creyente, es un río tranquilo pero hondo de sabiduría. Aunque mi prima y su marido no vayan a misa –Kilian tampoco, claro está- la casa está llena de imágenes e iconos de Jesús y de la Virgen.
De hecho, cuando algún desconocido viene a casa, a veces Kilian se encarga de las presentaciones: “Y aquí está la Virgen María”. Incluso en las cruces busca a María. Al principio, le daba por darle besos a mi cruz – y al cabo de un rato morderla también, pero bueno…
El otro día, había dejado mi móvil en la mesa del salón y Kilian vio enseguida este “objeto nuevo sin vigilancia” y fue a por ello sin dudarlo un instante, pero se paró en seco en su huida y se dio la vuelta con el brazo levantado, jubiloso porque acababa de ver que en la pantallita del móvil aparecía el rostro de la virgen de Guadalupe.
Y me grita: “¡Tía, es María!”. Acto seguido, acerca el teléfono a su mejilla y dice: “¿Allô, Marie?” http://picasaweb.google.es/luciabangelo/ALaMaison#slideshow
La misa diaria
es un regalo. Entre semana, estoy en Schoelcher, donde está la Universidad y donde vive casi toda mi familia.
Según qué día, voy a misa al noviciado de las hermanas de San Paul o a la parroquia de Schoelcher, porque mi tío es uno de los ayudantes del altar y se turna entre un sitio y otro. En el noviciado, tenemos los laúdes antes, y a pesar de que las hermanas canten muy desafinado suele acudir mucha gente a rezar. En Schoelcher, suele haber unas cien personas cada mañana. En ambos casos se canta de corazón J
Los fines de semana, suelo estar en casa de mi madre, en la ciudad del Lamentin. Allí, aprovecho para acudir a mi antigua parroquia y repasar un poco el curso para la semana siguiente …
Antes decía que se nota una fricción constante entre lo “moderno” y lo “antiguo”… En la vida espiritual, se podría decir que es entre lo “que está de moda en el mundo” y lo “auténtico que llevamos dentro”…
Se nota mucho en la parroquia del Lamentin, una “macro parroquia”, rebosante de vida, con unas 3 misas el domingo para 3000-4000 feligreses que participan activamente a la vida parroquial. Y es que desde hace unos diez o quince años, la lucha se ha intensificado: por un lado, los “jóvenes de hoy en día”, como mis primitos, muy expuestos a las drogas, la promiscuidad, la violencia y la depresión; por otro lado, los creyentes cada vez más comprometidos.
En la parroquia del Lamentin, se debe acortar cada misa a una duración máxima de dos horas para cumplir horarios, pero son misas celebradas con sumo cuidado y preparadas entre semana por los equipos de fieles del barrio al que le toque preparar: equipos de preparación de la palabra y de las moniciones, equipos de ministros que dan la comunión (unos 9 en cada celebración y para los enfermos en casa), equipos para la liturgia en general, equipos para las flores, equipos para preparar los cantos (se cantan luego con la coral que toque…), etc.
En cada barrio, hay responsables para cada uno de esos servicios, de igual modo que hay responsables para cada año de catequesis (1º año, 2º año, etc., jóvenes, adultos,..), para cada grupo de oración, de adoración eucarística, movimientos de escouts, etc… Puede ocurrir que la gente –como mi madre- acuda a una reunión cada noche porque se suelen apuntar a varios equipos… Luego dentro del mismo grupo hay que organizar turnos porque son demasiados!!
El obispo suele enviar seminaristas y nuevos sacerdotes para hacer practicas. Acudir a misa allí es todo un acontecimiento para quienes vienen de fuera: por ejemplo, al empezar la celebración, los fieles de servicio este domingo entran en procesión junto con el sacerdote, los señores ayudantes del altar, una decena de monaguillos y La Palabra…
Luego, durante la celebración, se hacen muchos gestos preciosos para marcar cada momento. Por ejemplo, en la oración del ofertorio, junto con las ofrendas presentadas ante el altar, el sacerdote ofrece los jóvenes y catecúmenos de distintas etapas: después de nombrar a cada grupo, les invita a levantarse y luego el resto de la asamblea (de paso, comprueba cuantos jóvenes acuden a cada celebración ;-)..)
Antes de la comunión los ministros forman un coro alrededor del altar para recibir los cálices junto con el monaguillo que acompañará cada uno con un cirio encendido durante la comunión. Igualmente, vuelven todos en procesión con los cálices en alto y forman un coro ante el sagrario mientras el sacerdote recoge cada cáliz y lo deja directamente en el sagrario. (Después de misa, el sacerdote, junto con el equipo de ayudantes vacían los cálices y depositan las formas consagradas en una “caja fuerte” porque en los últimos años se ha roto el sagrario un par de veces… L)
Después de la acción de gracias, viene el momento de los anuncios, de leer unas palabras del obispo, y/o de algún testimonio de jóvenes u otros fieles (Sidney, vocaciones, peregrinaciones, …)
http://picasaweb.google.com/luciabangelo/Lamentin#slideshow/
Vale, estamos en el Caribe y hace calor pero, en un mes y pico que llevo aquí, ha llovido casi todo el mes : vale, estamos en plena temporada de huracanes pero dicen que no había llovido así en veinte años… Hace unos días, en una noche de luna llena, una marea espectacular y más que inusual en el mar del Caribe, se llevó media costa oeste, descuartizando unos cuantos barcos dejados en los amarres a pesar de la alerta meteorológica…
Así que puedo tranquilizar a los envidiosos – por si mal de muchos fuera consuelo de tontos: aún no he ido a la playa desde que he llegado. También es cierto que no tengo coche todavía. Ya hablaremos dentro de un par de semanas, pues…
No quería incrementar el ya desmesuradamente grande parque automóvil de la isla pero tener coche se ha convertido en un bien básico: por la mala organización de los transportes públicos, por el tiempo (!), por la delincuencia (aparecida junto con las drogas duras a principios de los 90s), por … las prisas por llegar a pesar de tantos atascos L…
De momento, cojo el autobús de vez en cuando y el resto del tiempo me vehiculan los primos/as, compañeros/as del laboratorio; y cada mañana un tío con quien voy a misa de 6:30 (sí, 6:30).
O sea que todos los días, me levanto sobre las 5h -antes de la salida del sol pero ya hay algo luz- todos los días, menos los domingos, sí, sí. Ya se sabe, cuando no hace frío, no cuesta nada salir de la cama! Eso sí, intento apagar luces a las 22h!
Kay’ Léontine
Vivo en casa de mi tía-abuela Léontine (tiene 85 años pero no le gusta parar quieta), mi prima, su marido y su hijo de 2 años y medio, Kilian (alias “Jojo la Terreur” o “el intrépido”). Mi tía-abuela es muy creyente, es un río tranquilo pero hondo de sabiduría. Aunque mi prima y su marido no vayan a misa –Kilian tampoco, claro está- la casa está llena de imágenes e iconos de Jesús y de la Virgen.
De hecho, cuando algún desconocido viene a casa, a veces Kilian se encarga de las presentaciones: “Y aquí está la Virgen María”. Incluso en las cruces busca a María. Al principio, le daba por darle besos a mi cruz – y al cabo de un rato morderla también, pero bueno…
El otro día, había dejado mi móvil en la mesa del salón y Kilian vio enseguida este “objeto nuevo sin vigilancia” y fue a por ello sin dudarlo un instante, pero se paró en seco en su huida y se dio la vuelta con el brazo levantado, jubiloso porque acababa de ver que en la pantallita del móvil aparecía el rostro de la virgen de Guadalupe.
Y me grita: “¡Tía, es María!”. Acto seguido, acerca el teléfono a su mejilla y dice: “¿Allô, Marie?” http://picasaweb.google.es/luciabangelo/ALaMaison#slideshow
La misa diaria
es un regalo. Entre semana, estoy en Schoelcher, donde está la Universidad y donde vive casi toda mi familia.
Según qué día, voy a misa al noviciado de las hermanas de San Paul o a la parroquia de Schoelcher, porque mi tío es uno de los ayudantes del altar y se turna entre un sitio y otro. En el noviciado, tenemos los laúdes antes, y a pesar de que las hermanas canten muy desafinado suele acudir mucha gente a rezar. En Schoelcher, suele haber unas cien personas cada mañana. En ambos casos se canta de corazón J
Los fines de semana, suelo estar en casa de mi madre, en la ciudad del Lamentin. Allí, aprovecho para acudir a mi antigua parroquia y repasar un poco el curso para la semana siguiente …
Antes decía que se nota una fricción constante entre lo “moderno” y lo “antiguo”… En la vida espiritual, se podría decir que es entre lo “que está de moda en el mundo” y lo “auténtico que llevamos dentro”…
Se nota mucho en la parroquia del Lamentin, una “macro parroquia”, rebosante de vida, con unas 3 misas el domingo para 3000-4000 feligreses que participan activamente a la vida parroquial. Y es que desde hace unos diez o quince años, la lucha se ha intensificado: por un lado, los “jóvenes de hoy en día”, como mis primitos, muy expuestos a las drogas, la promiscuidad, la violencia y la depresión; por otro lado, los creyentes cada vez más comprometidos.
En la parroquia del Lamentin, se debe acortar cada misa a una duración máxima de dos horas para cumplir horarios, pero son misas celebradas con sumo cuidado y preparadas entre semana por los equipos de fieles del barrio al que le toque preparar: equipos de preparación de la palabra y de las moniciones, equipos de ministros que dan la comunión (unos 9 en cada celebración y para los enfermos en casa), equipos para la liturgia en general, equipos para las flores, equipos para preparar los cantos (se cantan luego con la coral que toque…), etc.
En cada barrio, hay responsables para cada uno de esos servicios, de igual modo que hay responsables para cada año de catequesis (1º año, 2º año, etc., jóvenes, adultos,..), para cada grupo de oración, de adoración eucarística, movimientos de escouts, etc… Puede ocurrir que la gente –como mi madre- acuda a una reunión cada noche porque se suelen apuntar a varios equipos… Luego dentro del mismo grupo hay que organizar turnos porque son demasiados!!
El obispo suele enviar seminaristas y nuevos sacerdotes para hacer practicas. Acudir a misa allí es todo un acontecimiento para quienes vienen de fuera: por ejemplo, al empezar la celebración, los fieles de servicio este domingo entran en procesión junto con el sacerdote, los señores ayudantes del altar, una decena de monaguillos y La Palabra…
Luego, durante la celebración, se hacen muchos gestos preciosos para marcar cada momento. Por ejemplo, en la oración del ofertorio, junto con las ofrendas presentadas ante el altar, el sacerdote ofrece los jóvenes y catecúmenos de distintas etapas: después de nombrar a cada grupo, les invita a levantarse y luego el resto de la asamblea (de paso, comprueba cuantos jóvenes acuden a cada celebración ;-)..)
Antes de la comunión los ministros forman un coro alrededor del altar para recibir los cálices junto con el monaguillo que acompañará cada uno con un cirio encendido durante la comunión. Igualmente, vuelven todos en procesión con los cálices en alto y forman un coro ante el sagrario mientras el sacerdote recoge cada cáliz y lo deja directamente en el sagrario. (Después de misa, el sacerdote, junto con el equipo de ayudantes vacían los cálices y depositan las formas consagradas en una “caja fuerte” porque en los últimos años se ha roto el sagrario un par de veces… L)
Después de la acción de gracias, viene el momento de los anuncios, de leer unas palabras del obispo, y/o de algún testimonio de jóvenes u otros fieles (Sidney, vocaciones, peregrinaciones, …)
http://picasaweb.google.com/luciabangelo/Lamentin#slideshow/
No hay comentarios:
Publicar un comentario